miércoles, 4 de julio de 2007

Mi odio

Siempre he dicho que la humanidad en general es un asco, especialmente el género masculino. Nosotras nacimos para amar, dar vida y mucho más, y ellos... no sé, no encuentro sentido a su existencia. No es feminismo.

Que somos complicadas... no, ellos son muy simples. Pero entre tanta porquería, se encuentran cosas perdidas, hombres buenos, aunque muy pocos.

Los humanos dicen ser superiores, se separan de aquellos hermanos que hacen llamar animales. Destruyen su casa, como si fácilmente pudieran encontrar otra. No les importa nada, más que, aparentemente, ellos mismos. Digo aparentemente, puesto que ni con ellos mismos son felices, se autodestruyen y hasta lo disfrutan. Hombre, mátate si quieres, pero no me lleves contigo, que yo no tengo la culpa de tus desgracias.

Y luego viene el amor, la maldición y bendición de muchos. El maldito amor, cómo hace sufrir, cómo hace llorar, te quita las ganas de vivir. El bendito amor, espero que puedan saber qué es lo que es.

La vida... que fastidio.

Religión, creer en Dios... otra asquerosa invención humana. Ya dejen de manipular, quiero tener mi propio criterio, mi propio castigo, vivir mi infierno y llegar al cielo. Ser mi propio dios.

Yo... que desagradable ser, vive de las letras y ama a una niña rubia ojiazul. No tiene oportunidad de sobrevivir en este lugar, necesita su propio mundo. Qué tonta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me gusto mucho tu escrito, baastante realista, tienes un punto de vista bien definido e inclusive algo tetrico por asi decirlo jeje, buen escrito

la muerte de Erhoz